ciberdelincuencia
20 de September de 2022
La longitud y los tipos de caracteres empleados son dos de los factores que más influyen en la seguridad de las contraseñas

 

¿Eres de los que recicla tus contraseñas? ¿Utilizas tu fecha de nacimiento o el nombre de tu mascota? O quizás te identifiques más con el uso de cadenas de números o letras como las típicas “123456”, “qwerty” o "password". Este tipo de prácticas son muy habituales entre las personas usuarias de internet y quizá deberías replantearte  cambiar las tuyas.

Uno de los aspectos importantes para generar una contraseña segura es la longitud. Cuanto más extensa sea, mayor tiempo le llevará a un programa informático descifrarla.

De acuerdo con el sitio del Foro Económico Mundial, una contraseña con 12 caracteres que contenga al menos una letra en mayúscula, un símbolo y un número requeriría 34.000 años a una computadora para poder descifrarla.

Lamentablemente, la realidad muestra que pasan los años y una gran cantidad de usuarios continuamos utilizando contraseñas extremadamente débiles y fáciles de predecir. 


              ¿Cuánto tardarían en averiguar mis contraseñas?

 

 Errores a evitar:

  • Reciclar contraseñas: un error muy frecuente es utilizar la misma clave para múltiples cuentas o aplicaciones.
  • Memorizar contraseñas en función del teclado: muchos usuarios usan el teclado como guía para recordar contraseñas fácilmente (ej.: “123456” o “qwerty”).
  • Usar expresiones hechas como contraseñas de frases como “teamo”, “iloveyou”, “teodio”, etc.
  • Utilizar aficiones: algunos usuarios fanáticos suelen usar el nombre de sus marcas, deportes, equipos o bandas de música favoritas.
  • Apuntarlas en notas: aunque se haya creado una clave robusta, nunca se debe dejar por escrito y mucho menos a la vista de cualquiera.
  • Hacer uso de patrones sencillos: como que la primera letra esté en mayúscula seguida de 4 o 5 en minúscula o usar uno o dos números y finalizar con un carácter especial como un punto o signo de exclamación (Ej.: Perro26!).
Gestionar contraseñas robustas no debería ser una tarea complicada o difícil de recordar. Una opción es sustituir algunas letras por números parecidos, por ejemplo, la “e” por el “3”. De esta manera la clave termina siendo difícil de descifrar, pero al mismo tiempo fácil de recordar
 

Gestores de contraseñas

Los gestores de contraseñas son aplicaciones que sirven para almacenar todas nuestras credenciales (usuarios, contraseñas, sitios web a los que corresponden, etc.) en una base de datos cifrada mediante una contraseña “maestra”. De este modo, podemos gestionar todas nuestras cuentas de usuario desde una misma herramienta, memorizando únicamente una clave maestra.

En el mercado existe una gran variedad de aplicaciones con esta función, tanto para dispositivos móviles como para ordenadores Windows o macOS. También existen gestores de contraseñas que funcionan desde el navegador.