¡Todo un descubrimiento!
¿Conocéis la mazada? es un derivado lácteo, llamado también suero de mantequilla, con múltiples propiedades y muy rico nutricionalmente.
Existe constancia de su elaboración ya en la Edad Media. En España, y más en concreto en nuestro “Paraíso Natural”, la tradición proviene de núcleos rurales de cultura vaqueira.
Cómo se obtiene
Durante el proceso de elaboración de la mantequilla. Tenemos como materia prima la leche entera, ésta se somete al proceso de desnatado y como resultado tenemos la nata y la leche desnatada, a su vez la nata se bate para obtener dos productos, uno sólido-graso a partir del cual se elaborar la mantequilla y uno líquido que es la mazada. Al proceso de batir la nata se le denomina mazado, de ahí el nombre de este lácteo.
Desde el punto de vista nutricional:
- Fuente de proteínas de alta calidad.
- Con un aporte interesante en hidratos de carbono.
- Reducido contenido de grasa, solo un 0,7%.
- Con vitaminas varias, sobre todo del grupo B.
- Rica en sales minerales como calcio, potasio o fósforo.
Desde el punto de vista organoléptico:
- Color blanco-amarillento.
- Textura suave y cremosa.
- Sabor ligeramente ácido.
La mazada se parece a la leche desnatada al hacerse a partir de la parte acuosa y la podemos consumir de muchas maneras, en el desayuno al igual que tomamos leche, sola o con café o en infusiones y también se puede emplear para múltiples recetas al aportar textura, a nuestras salsas, batidos, cremas de verduras, sopas,… debido a su función tecnológica como emulgente.
Beneficios para nuestra salud:
- Reduce la absorción del colesterol.
- Posee propiedades protectoras del hígado.
- Contribuye al desarrollo y activación del sistema inmune.
- Efecto anticancerígeno, especialmente contra el cáncer de colon.