Día Mundial del Suelo
26 de November de 2021
El 5 de diciembre se conmemora el Día Mundial del Suelo.

El objetivo de este año con la celebración de tal día se centra en “detener la salinización de los suelos, aumentar su productividad.” Fue en 2014 cuando la ONU designó tal día (propuesta de la FAO un año antes), para así contribuir a favorecer la promoción de hábitos y políticas más responsables y sostenibles que traigan consigo una utilización adecuada de los recursos. Se pretende por lo tanto despertar conciencia y reflexionar sobre las diferentes actuaciones que se están desarrollando en los diferentes puntos del planeta que pueden poner en riesgo el futuro del suelo.

Mantener un  suelo vivo, saludable, garantizando su biodiversidad, potenciando una huella sostenible y ecológica, es imprescindible actualmente, más teniendo en cuenta que cada vez se encuentra en mayor riesgo a consecuencia del conocido cambio climático, así como de la alta explotación de los propios recursos naturales que nos ofrece. Por ello, como personas consumidoras, conocer con qué materiales se ha fabricado aquello que utilizamos, si han sido previamente reciclados, si son biodegradables, o si por el contrario tardan décadas o cientos de años en degradarse en el entorno… son algunos de los aspectos que presumiblemente ayudarán a que podamos tomar conciencia de cómo la sociedad gestiona y hace uso de tales recursos. Una de las cuestiones mencionadas y que resulta interesante es el concepto de biodegradabilidad. 

Cuando se hace mención a éste, se está refiriendo a “la capacidad que tiene un material para ser biodegradado, es decir, descomponerse  de manera natural por la acción de agentes biológicos como microorganismos, hongos, bacterias o algas, junto a otras condiciones ambientales que se dan en la naturaleza, como la presencia de sol o agua.”  

Algunos ejemplos que nos ayudarán a reflexionar son:

Aluminio. Este material puede tardar aproximadamente 10 años (lo más común es que tarden 20-30 años) hasta incluso 100 años en biodegradarse. La horquilla de tiempo señalada es realmente amplia, pero  lo interesante es que se trata de un material que puede ser reciclado casi en su totalidad, por lo que depositarlo en el contenedor amarillo sería fundamental para favorecer su posterior reciclaje.

Brik. Este tipo de envase supone un reto, ya que está confeccionado con tres materiales diferentes: cartón, plástico y aluminio, lo que resulta interesante en cuanto a conservación de alimentos, pero un serio problema en cuanto a gestión de materiales y cuidado medioambiental, considerado por ello como uno de los envases menos sostenibles (reciclarlo resulta muy costoso) Tarda unos 30 años en degradarse al aire libre y en condiciones ambientales normales. 

Vidrio. Un material que puede tener dos vertientes. Por un lado puede tardar más de 1000 años, hasta incluso 4000 años en biodegradarse. Pero por otro lado, algo interesante de este material, es que se puede reciclar infinitas veces, por lo que la opción de dejarlo tirado en un campo o en la calle no ha de estar en la lista, sino que lo importante es depositarlo en el contenedor verde para que así pueda ser reciclado.

Pilas. Residuo altamente contaminante, por lo que tirarlas al agua o dejarlas tiradas en el suelo no ha de ser opción. Tardarían en biodegradarse entre 500 y 1000 años. Pero no sólo eso, sino que una pila de botón de mercurio, puede llegar a contaminar hasta 600 mil litros de agua, por lo que buscar un contenedor especial para depositar este residuo ha de ser la solución para prevenir una mayor contaminación medioambiental.

Aceite usado doméstico. Otro residuo altamente contaminante, que puede llegar también a tardar aproximadamente unos 150 años en biodegradarse. Un serio inconveniente si lo tiramos por el desagüe, ya que entre otros problemas puede atascar tuberías, inducir al aumento de las plagas, así como contribuir a que las aguas puedan llegar a recibir más residuos tóxicos que contribuyan al aumento de la contaminación, perjudicando así al ecosistema marino. Por ejemplo, algunos estudios indican que un litro de aceite usado desechado por el fregadero y que llegue a nuestras aguas puede llegar a contaminar más de 40.000 litros.

 

Para más información sobre la conmemoración de este día, os remitimos al siguiente enlace.

https://www.fao.org/world-soil-day/es/

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