Día Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos
La Asamblea General de las Naciones Unidas, en 2019, eligió tal día como hoy, 29 de septiembre, para sensibilizar y recordar a toda la sociedad algo tan importante y necesario actualmente, como es la promoción de un consumo y producción responsables.
En el 2020 “más de 1.300 millones de Kilos/litros de alimentos terminaron en la basura en nuestro país” según datos aportados por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Es cierto que existe una mayor concienciación en cuanto a hábitos de consumo en alimentación se refiere, pero aún queda mucho trabajo por hacer, motivo por el cual se cree imprescindible la conmemoración de este día, que nos haga reflexionar sobre la imperiosa necesidad de promover un consumo más sostenible.
En este sentido, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) ha lanzado también una campaña “Aquí no se tira nada. Más alimento, menos desperdicio” centrada en la importancia de impulsar hábitos responsables, pues desechar esta gran cantidad de alimentos supone también un gasto y desperdicio en recursos naturales empleados en la producción y distribución de éstos: desde la explotación de tierras, alto consumo de agua, gasto en energía… Por ello, adquirir y promover rutinas alimentarias que verdaderamente se ajusten a nuestras necesidades reales, nos ayudará a minimizar el volumen de lo que acabamos tirando al contenedor al adquirir únicamente aquello que vayamos a consumir.
Desde la Red de Centros de Formación para el Consumo os recordamos algunas de las pautas que desde nuestros itinerarios formativos intentamos promover en pro de un consumo consciente, sostenible y responsable.
- Revisar la despensa y organizarla en base a fechas de caducidad y consumo preferente. Es un primer paso para así conocer qué tenemos guardado, qué es lo que deberíamos de consumir con mayor premura, y qué es lo necesitamos realmente comprar..
- Examinar también la nevera, para así consumir aquello que antes se pueda estropear y no acabe en el contenedor de la basura. En este sentido, si vemos que disponemos de restos de comida variada, podemos intentar elaborar algunas recetas de aprovechamiento que sin duda alguna saldrán deliciosas.
- Al ir al supermercado es fundamental no olvidar hacer la lista de la compra, donde se debería de apuntar únicamente aquello que necesitamos, en base a lo que vayamos a cocinar. No deberíamos dejarnos llevar por los caprichos de última hora, o por el “por si acaso”, ya que entonces la probabilidad de que acabe en la basura aumenta.
- Y cuando vayamos a elaborar la comida, resulta importante ajustar la cantidad en base a cuántas personas van a comerla, o los días que se va a comer en casa, incluso elaborar un planning si fuera necesario, para así evitar tirar comida que haya podido quedarse atrasada y por lo tanto se haya visto alterada o estropeada.
4 simples recordatorios que seguro que tienen un impacto positivo en el cuidado del entorno y en el aprovechamiento de los alimentos.