Si es original, mejor
Desde el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo se ha lanzado una campaña que aboga por estimular la compra de productos originales.
El lema elegido es “efectos secundarios”, y se cree necesaria tal campaña institucional porque según apuntan “el fenómeno de la falsificación representa una gran amenaza para la innovación, el crecimiento económico, la creación de empleo y la salud, y su control requiere una acción coordinada, a todos los niveles tanto a nivel de la Unión Europea como a nivel global para ser abordada en su totalidad.” Es cierto que dicha campaña tiene su finalización este mismo mes de diciembre, pero a la hora de adquirir ciertos productos como son por ejemplo los medicamentos, podríamos seguir haciendo hincapié en la importancia de extrapolar dichas campañas a todo el año y no sólo a momentos puntuales.
La compra de medicamentos vía online resulta muy sencilla y al alcance de cualquiera. Sólo basta con poner en un buscador “medicamentos online” y son muchos los portales a los que se pueden acceder para ello. Siempre que se compre por Internet es importante asegurarse de que la página a la que accedemos sea segura (https:// o la imagen de un candado verde), y si queremos comprar algún tipo de medicamento sin receta por esta vía, lo de asegurarse de que sea una página segura aún resulta más necesario.
Para evitar la compra de medicamentos que pudieran ser fraudulentos, y que por lo tanto supongan un riesgo elevado para nuestra salud y bienestar, tenemos que asegurarnos que el portal al que accedamos cuenta con un pictograma que nos verifique que dicha farmacia online es legal. Sólo así podremos confiar en que los medicamentos (sin receta) que se vayan a adquirir de este modo sean seguros.
Proporcionar seguridad y confianza a la persona consumidora es importantísimo en este ámbito, por ello, además de incorporar la presencia de tal indicador / pictograma en la venta online, también se llevaron a cabo dos adaptaciones en cuanto a los medicamentos con receta. El primero de ello se trata de “un identificador único (en forma de código datamatrix) que contiene el código de producto, un número de serie de 20 caracteres generados por un algoritmo de aleatorización, el número de lote y la fecha de caducidad.”, y en segundo lugar un sistema de anti-manipulación que garantice al 100% que el envase no ha sido manipulado en ningún momento a lo largo de toda la cadena de producción y distribución hasta su dispensación en la farmacia.
Prevención, confianza, seguridad y responsabilidad son algunas de las pautas que deben estar presentes en nuestros hábitos de consumo.