10 de abril de 2023
El pasado mes de marzo en el Centro de Formación para el Consumo de Tineo se llevó a cabo la actividad “Saber lo que comemos” con un grupo de personas adultas

El pasado mes de marzo en el Centro de Formación para el Consumo de Tineo se llevó a cabo la actividad “Saber lo que comemos” con un grupo de personas adultas pertenecientes al Centro de Apoyo a la Integración de Penlés (Cangas del Narcea).

Sal y azúcar

A lo largo de la sesión, se trataron temas como el azúcar oculto en los alimentos así como el contenido de sal. Los asistentes se quedaron impresionados con la cantidad de azúcar que contienen ciertos productos que se consumen de forma habitual y que en, muchas ocasiones, superan el contenido diario de azúcar que recomienda la Organización Mundial de la Salud.
Esta parte de la sesión se complementó con los paneles del azúcar en los alimentos, con los que con un simple vistazo se obtiene información relevante sobre la presencia de azúcar en determinados alimentos o refrescos.

Los aditivos

También se abordó el tema de los aditivos alimentarios, un término que para ellos resultaba desconocido pero que fácilmente aprendieron a identificar en el etiquetado de los alimentos. Mediante la realización de diversos experimentos, el grupo adquirió conocimientos de forma práctica acerca de ellos, su función e incluso, alternativas saludables.

El huevo

Otro aspecto que sin duda impresionó a todos fue “la porosidad de la cascara del huevo”, y cómo tras sumergir un huevo un par de días en vinagre, su cáscara llega a desaparecer, volviéndose tan flexible como una pelota. Tuvieron la oportunidad de observarlo y tocarlo apreciando su nueva textura, ¡incluso realizaron unos pequeños botes con el mismo sin que llegara a romperse!

Los hidratos de carbono

Asimismo, la detección de hidratos en el embutido fue un experimento que también causó gran impacto. Resultó muy interesante ver cómo ellos mismos pueden llevar a cabo un control de calidad de alimentos utilizando tan solo tintura de yodo. Cuando observaron como la tintura reaccionaba al almidón cambiando de color se quedaron boquiabiertos.  

En definitiva, se trató de una sesión en la que el grupo paso un rato agradable mientras aprendían en el CFC, unas experiencias enriquecedoras en la que todos los presentes se llevaron muy buenas impresiones.

                                            



                

 

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